Diario de una inmortal (3)
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4 octubre 1888
El periodo es estupendamente ideal por todos los descubrimientos, todos los deslumbramientos.
Tomé la decisión de hacer studios médicos. Me encanta hacer la autopsia de los diferentes entre mortales y inmortales. Lo que me obligará a matar a uno de los míos: ¿madre o hermana? ¿O mi cuñado idiota?
La audacia de los investigadores científicos nunca ha sido tan viva. Yo que nací a finales del siglo XVII me doy cuenta de la extraordinaria vitalidad, a pesar del puritanismo victoriano, que nos agarró a principios de esta Revolución industrial. La electricidad, el telégrafo, los notables inventos de Edison, los progresos de la medicina... el tren!
Correr con los lobos es una felicidad indecible, pero sentir la vibración del vagón y la velocidad penetrar en mi cuerpo es increíblemente emocionante. Me maravilla el poco interés que mi clan tiene por estos avances revolucionarios. ¿En serio, creen que la inmortalidad va a preservarnos del futuro?
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Whitechapel se ha convertido en el lugar de todos los rumores y indescriptibles horrores. Los periódicos y los paseantes sólo hablan de Jack el Destripador y de su forma lamentable de mutilar a sus víctimas. ¿No podría hacerlo con un toque artístico?
Sin pistas serias, solamente una cantidad extravagante de chismes y especulaciones que llevan a ninguna parte, y menos aún al asesino. Ataca a las prostitutas, y siento una fuerte aversión por esta discriminación criminal. Le doy dos días para salir de Londres o de ser aprehendido. Si no, voy a tratar personalmente su caso. Con este refinamiento que me caracteriza. Quién me conoce, sabe que mis escenificaciones están siempre muy ordenadas.
Esta mañana en casa de Oscar Wilde, me encontré a un joven médico polaco. La sed de su conocimiento y de progreso se vincula a una oscura obsesión por la inmortalidad. Pobre pequeño hombre que tiembla de no saber lo que son la noche y la sombra y la niebla! Sin embargo, espero verlo de nuevo para continuar mis investigaciones. Si conozco la causa de mi naturaleza inmortal, todavía no puedo explicarla. Yo estoy hecho de carne y hueso como este médico apenas nacido y obviamente ya al umbral de la vejez. Cada segundo trae la muerte. Cada segundo condena sus células y se espesa su sangre, disminuyendo su respiración y sus facultades intelectuales. Cada segundo aumenta mi esperanza de vida y me fortalece.
Oscar nunca deja de sorprenderme por la vivacidad de su mente, y su deliciosa extravagancia.
Mientras hablábamos con pasión, sentí que Wilde me miraba con una intensidad inusual. ¿Tendría alguna sospecha? El que acaba de hablar con nosotros sobre su nuevo y asombroso proyecto literario. La historia de Dorian Gray, un joven que ofrece su alma por que su retrato envejece en su lugar, y él mantiene la belleza y la juventud.
Continuará…
Foto de Jack el Destripador © Wikipedia